El presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, felicitó anoche a los galardonados en la entrega de premios Sicaman 2003 y a los que un año más hicieron posible este acto con la participación de un numeroso público.

Durante el acto, el presidente resaltó que si estos premios tienen un mérito se debe principalmente a que quienes los entregan y quienes los reciben no son soberbios y nos les duele en prenda reconocer quién vale.

Además, añadió, los méritos de cada uno de los premiados simbolizan valores en los que, como sociedad, nos sentimos identificados. “Los premiados evocan sentimientos de gente normal que acrecientan el orgullo de ser albaceteños o castellano manchegos; el orgullo de ser de los nuestros y de nuestra tierra”.

José Bono entregó el premio al albaceteño del año, que en esta edición lo recogió Carmina Useros Cortés, miembro del Instituto de Estudios Albacetenses y autora de numerosos libros, entre los que hay que destacar “Cocina de Albacete” y la “Guía de la Gastronomía de la Mancha” de la que es coautora.

Los premiados en esta edición fueron en la modalidad “Premio Empresa” el Instituto Oftalmológico de Albacete: en Deporte, los hermanos Raúl y Félix Rodríguez por su actividad en parapente; el Premio Cultura al pintor José Enguídanos; en Investigación al Centro Regional de Investigaciones Biomédicas; en Valores Humanos a Alberto Carrión; en Toros a Antón cortés y en Comunicación a Manuel Sáez.

En su discurso, el presidente evocó el trabajo de los antepasados manifestando que “a veces nos creemos superiores, gigantes, pero si lo pensamos bien somos como enanos, que si vemos más lejos que los demás es porque estamos más alto, pero no por nuestra estatura. Seguimos siendo enanos, vemos más lejos porque estamos subidos encima de los hombros de gigantes”.

Bono subrayó, en este sentido, que aunque a veces se pueda sentir en la vanidad, que “somos más altos, somos enanos subidos encima de los hombros de gigantes. Otros pueblos, como el andaluz han tenido quienes les canten en la historia. Nosotros podríamos decir que hemos sido mano de obra barata. Miles de ciudadanos de esta tierra no aparecen en los libros de historia, a pesar de ser los gigantes sobre los que nos hemos subido”.

Todos los premiados evocan ese sentimiento de gente normal, añadió y todos podrían contar un origen que coincide con el nuestro, que no llama la atención más que por el premio, “pero son gente normal que destaca y eso nos produce el orgullo de ser de los suyos”, explicó Bono, añadiendo que “sentimos por ello el orgullo de ser de esta tierra”.