El consejero de Bienestar Social, Tomás Mañas, ha anunciado hoy en Guadalajara que la nueva residencia de mayores de El Balconcillo de la capital alcarreña recibirá en los próximos días a sus primeros usuarios, una vez se ha obtenido la licencia de apertura.

Como ha querido recordar el consejero, que ha estado acompañado por el delegado de la Junta en Guadalajara, Ángel Padrino, y el titular provincial de Bienestar Social, Luis Santiago Tierraseca, la de El Balconcillo es la mayor residencia que ha construido el Gobierno regional en los últimos años, ya que cuenta con capacidad de 160 plazas para mayores residentes y 40 más en su servicio de Centro de Día.

La construcción y puesta en marcha de esta residencia por parte de la Junta supondrá igualmente una inyección de puestos de trabajo. Según ha destacado Mañas, los 200 mayores de este recurso serán atendidos por entre 150 y 160 personas, de las que una amplia mayoría serán mujeres, que ocuparán puestos de fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales, trabajadores sociales y auxiliares de clínica, entre otros.

Tal y como ha detallado el titular regional de Bienestar Social, la residencia de El Balconcillo contará con 120 habitaciones individuales y 20 dobles, estando el centro dirigido a personas mayores asistidas. En lo que se refiere al servicio de estancias diurnas, el consejero ha explicado que se recogerá en su domicilio a aquellas personas mayores que no puedan llegar por sí mismos o no puedan ser llevados por sus familiares. Durante su estancia estarán atendidos y realizarán los ejercicios más adecuados en cada caso, regresando cada tarde a sus domicilios.

Viviendas de mayores

En alusión a la visita que iba a realizar para visitar las obras de las viviendas de mayores de Alustante y El Pobo de Dueñas, el consejero se ha querido referir a este tipo de recurso, que permiten la doble función de atender a las personas mayores, evitando que tengan que salir de sus localidades de origen, y generar puestos de trabajo que ayudan a fijar población. Según Mañas, el objetivo de la Consejería es “ofrecer a los mayores, independientemente de donde se encuentren, una mayor calidad de vida”, con la premisa de evitar que tengan que salir de su lugar habitual de residencia.

La provincia de Guadalajara es la segunda de Castilla-La Mancha tanto en número de viviendas para mayores como en número de plazas en este tipo de recursos, según ha afirmado Mañas, quien ha puesto de manifiesto la importancia de estos centros. Según ha explicado, Castilla-La Mancha se encuentra a la cabeza de España en número de viviendas tuteladas y plazas, ya que existen en nuestra región 140 viviendas para mayores con más de 1.330 plazas. En el caso de la provincia de Guadalajara, ha señalado que existen 34 viviendas para mayores para 339 residentes.

Tomás Mañas ha querido poner de manifiesto la voluntad del Gobierno regional de “no quedarnos aquí” y seguir fomentando este tipo de recursos, debido al alto grado de satisfacción que muestran los mayores y también a que posibilita que en las localidades pequeñas, aquellas personas con más de 65 años que no pueden seguir viviendo en su hogar puedan continuar residiendo en su pueblo dentro de un entorno controlado y accesible, donde son atendidos en las labores de la vida cotidiana.

La importancia que desde la Consejería de Bienestar Social se da a estas viviendas queda patente si se tiene en cuenta que en estos momentos se encuentran en construcción 16 recursos de este tipo, lo que supondrá la puesta en marcha durante los próximos meses de 160 nuevas plazas en este tipo de centros residenciales para la Tercera Edad.

De hecho, según Mañas, durante el presente año la Consejería de Bienestar Social está invirtiendo en la provincia de Guadalajara más de 5,8 millones de euros para la construcción de nuevas viviendas y el mantenimiento de las 34 ya existentes.

Además, ha asegurado que de aquí a finales de año se pondrán en marcha nuevas viviendas en Salmerón, Tartanedo y Zaorejas, además de la de Alustante, mientras que se ultimarán en los próximos meses las de municipios como Alhóndiga, Atanzón, Hita, Checa, Romancos o Tartanedo, entre otros.

Las viviendas para mayores son recursos residenciales pensados para acoger a un máximo de 12 personas, y son muy demandados en aquellas provincias como Guadalajara y Cuenca que cuentan con un mayor número de localidades pequeñas.