TÓMAS MAÑAS: "NUESTRA REGIÓN SE ENCUENTRA POR DEBAJO DE LA MEDIA EN NIVEL DE POBREZA"
El informe del Consejo Económico y Social destaca que el nivel de pobreza extrema en Castilla-La Mancha se sitúa en un índice de 5, frente al 6,4 que posee la media nacional.
Los proyectos de inserción y el salario social puestos en marcha por la Consejería de Bienestar Social, durante la aplicación del I Plan Regional de Integración Social, son los instrumentos que han permitido que Castilla-La Mancha reduzca los niveles de pobreza extrema y grave por debajo de la media nacional.
Así, lo afirmó el consejero de Bienestar Social, Tomás Mañas, ante el pleno de las Cortes regionales en el que se debatió el dictamen del II Plan Regional de Integración Social, recientemente aprobado por el Gobierno castellano-manchego.
Durante su intervención, Tomás Mañas se refirió al informe emitido por el Consejo Económico y Social de España, que destaca que nuestra región se encuentra por debajo de la media en los niveles de pobreza extrema, con un índice de 5 frente al 6,2 de media; y de pobreza grave con un índice de 9,8 frente a la media del 14,2.
Para seguir ahondando en la eliminación de las desigualdades que provoca la exclusión social de familias que viven en barrios desfavorecidos y colectivos como inmigrantes o gitanos, ya se encuentra en marcha el II Plan Regional de Integración Social. Una nueva iniciativa en la que se han incorporado mejoras, surgidas de la experiencia adquirida durante el desarrollo del I Plan.
En este sentido, aunque los resultados del primer programa han sido ampliamente satisfactorios, en palabras del titular de Bienestar Social quien destacó que más de 6.300 personas se incorporaron al mercado laboral, se ha detectado que las medidas e intervenciones eran excesivamente individualizadas.
Para evitar esto, en el nuevo Plan se incluyen nuevas medidas con carácter transversal que incidirán en abordar las causas de la pobreza y la marginación, con actuaciones integrales no sólo con los individuos sino también en el entorno.
Para ello este II Plan Regional tendrá cuatro líneas básicas de actuación: de manera genérica sobre las personas y familias que se consideran en situación de exclusión; los destinados de manera específica a la etnia gitana y la población inmigrante, y el desarrollo de los barrios marginales donde se agrupa la población objetivo del PRIS.
475 millones de euros
Tomás Mañas aseguró, durante su comparecencia ante el pleno de las Cortes regionales, que la puesta en marcha de este programa supondrá una inversión superior a los 475 millones de euros, de los cuales algo más de 80 millones se destinarán a la financiación de los proyectos previstos en este II Plan, y los 395 millones restantes a las prestaciones directas que aparecen recogidas en la Ley de Solidaridad.
Así, este II PRIS, que ya se encuentra en marcha, está desarrollando actualmente 238 proyectos de integración en toda Castilla-La Mancha, una cifra que durante los próximos meses se ampliará a los 260 proyectos.
El titular de Bienestar Social destacó durante su intervención que uno de los objetivos básicos del nuevo Plan Regional de Integración es pasar de una cultura de la subvención, a una cultura de la financiación de programas y proyectos, donde los beneficiados se impliquen directamente en salir de la situación de exclusión en que se encuentran.
Sin embargo, esto no sería posible con el simple concurso de la Administración autonómica, por ello el II PRIS establece la coordinación entre las distintas consejerías (Bienestar Social, Educación, Obras Públicas e Industria), ayuntamientos, asociaciones y organizaciones no gubernamentales y la empresa privada.



