Según destacó hoy el consejero Portavoz, Emiliano García-Page, en relación con el fenómeno del “botellón” CASTILLA-LA MANCHA ES PIONERA EN LA PROHIBICIÓN DE LA VENTA DE ALCOHOL A MENORES DE 18 AÑOS
El consejero Portavoz, Emiliano García-Page, abogó hoy porque las distintas administraciones trabajen de una manera colectiva para endurecer la normativa en relación con la venta de alcohol a menores de 18 años, así como para ofrecer alternativas de ocio encaminadas a cambiar los hábitos y actitudes de los jóvenes y aumentar la presencia policial en los lugares donde pueda verse afectado el orden público por el consumo de alcohol en la calle.
Durante la habitual rueda de prensa para informar de los acuerdos adoptados en el Consejo de Gobierno, el Portavoz del Ejecutivo regional aseguró que Castilla-La Mancha ha sido una comunidad pionera en la regulación de la prohibición de la venta de alcohol a menores, y recordó que “cuando en España nadie se planteaba este problema como tal, esta región fue sensible y reguló esta situación en lo que la legislación general del Estado permitía”.
El consejero se refería así a la normativa propuesta por el ministro del Interior, Mariano Rajoy, que pretende prohibir el consumo de alcohol en la vía pública y elevar a los 18 años la edad mínima para poder comprarlo.
En este sentido, García-Page aseguró que el fenómeno conocido como “botellón” puede ser abordado sin necesidad de modificación legal alguna, ya que se trata de un problema de orden público que afecta a la tranquilidad y a la seguridad de las personas, cuya competencia corresponde a la Administración del Estado. “La prueba más evidente –reconoció- es que en determinadas ciudades la sola presencia de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado ha evitado, disuadido o modificado ya esa realidad”.
Además, en opinión del consejero, el consumo de alcohol en los jóvenes tiene que ser abordado desde el cambio de hábitos y actitudes en este colectivo, lo que debe hacerse desde la prevención y el ofrecimiento de alternativas de ocio, áreas en las que el Gobierno de la región lleva bastantes años trabajando en colaboración con los ayuntamientos.
Para García-Page, en el ámbito normativo Castilla-La Mancha ha ido por delante y “estamos en la dirección de estudiar mayores limitaciones en la venta de alcohol en determinados lugares y en determinados horarios”.
En este sentido, aseguró que la Consejería de Sanidad está trabajando desde hace meses en la idea de endurecer la normativa y aumentar la oferta de actividades, a lo que añadió que “sería bueno escuchar en la Administración del Estado un discurso similar”.