Pretenden que sea reconocida como un producto típico y exclusivo de la zona mediterránea de la Unión EL SECTOR QUIERE QUE LA UE TENGA EN CUENTA LA RESINA CUANDO SE NEGOCIE LA ESTRATEGIA FORESTAL EUROPEA
El director general de Medio Ambiente, Alberto Saiz, explicó que ésta es una de las conclusiones obtenidas en el simposio internacional de la resina, celebrado los días 6 y 7 de febrero, y cuyos resultados han sido analizados en la reunión de la Mesa Sectorial de la Resina, celebrada esta mañana en Toledo.
El director general de Medio Ambiente, Alberto Saiz, explicó que ésta es una de las conclusiones obtenidas en el simposio internacional de la resina, celebrado los días 6 y 7 de febrero, y cuyos resultados han sido analizados en la reunión de la Mesa Sectorial de la Resina, celebrada esta mañana en Toledo.
El sector de la resina quiere que la Unión Europea reconozca este producto como típico y exclusivo de la zona mediterránea y sea tenido en cuenta cuando se negocie la estrategia forestal europea. Esta es una de las conclusiones a las que se llegó en el simposio internacional de la resina, celebrado los días 6 y 7 de febrero, y cuyos resultados fueron hoy analizados por la Mesa Sectorial de la Resina.
El director general de Medio Ambiente, Alberto Saiz, que calificó de "espectaculares" los resultados del simposio, destacó que el objetivo de este encuentro es crear un sector europeo donde hasta ahora no existía y entrar en los órganos de decisión europea, concretamente acceder a la Dirección General VI -de Agricultura- y crear un comité consultivo de la resina en Bruselas.
"Este es el mejor momento porque ahora se está decidiendo el nuevo programa operativo y la nueva financiación de fondos para el período 2000-2006 y es bueno que en este panorama sea cuando se reconozca un producto típico de la zona mediterránea", indicó Saiz.
En este sentido, el director general se mostró optimista porque, a espera de una respuesta oficial, "tenemos muy buenas expectativas de que se pueda crear un grupo de expertos para asesorar en Bruselas cuando llegue el momento de tomar decisiones en torno a la estrategia forestal europea y se logre que la resina, un producto genuino, ocupe el lugar que le corresponda".
En opinión del director general, la organización de un sector resinero de carácter europeo es importante, especialmente porque España partiría con algunas ventajas: las condiciones genéticas de sus masas forestales para la producción de resina y la utilización y experimentación ya iniciada con métodos novedosos de extracción de la miera, que nos permitirá producir con bajos costes y, por tanto, tener precios competitivos.
Asimismo, la recuperación de la rentabilidad de esta actividad, que ha sido tradicional en nuestros pinares, tendría también efectos positivos sobre la protección del medio ambiente, la generación de empleo y el desarrollo de zonas rurales deprimidas.
Junto al análisis de este simposio, la Mesa Sectorial de la Resina, que se constituyó a finales del 96 con el objetivo de reactivar el sector resinero que en la comunidad autónoma estaba prácticamente desaparecido, ha adquirido también una serie de compromisos para este año.
Saíz recordó que el año pasado la Mesa, en la que está representada todo el sector, así como la Administración regional (gestora de los montes públicos), los ayuntamientos (propietarios de montes de utilidad pública) y el Instituto Nacional de Investigación Agraria (INIAA), puso en marcha varios cursos de formación sobre los nuevos métodos de extracción de la miera y se pusieron en marcha parcelas de experimentación en la provincia de Cuenca, fundamentalmente.
"El compromiso de este año es continuar el trabajo en las parcelas de experimentación, que se extenderán a la zona de El Rodenal (Guadalajara), así como hacer un seguimiento exhaustivo de los resultados y una evaluación de los costes para poder valorar la competitividad del producto en el mercado", dijo Saiz.
Por último y en opinión del director general, los resultados obtenidos en las parcelas experimentales de la región abren buenas expectativas, ya que con una producción media que supera los 2,5 kilos por árbol y con un sólo individuo trabajando en cerca de 10.000 árboles (las técnicas antiguas lo reducen a 5.000 árboles), la rentabilidad está prácticamente asegurada.