El consejero de Bienestar Social, Tomás Mañas, mostró hoy en Cuenca su satisfacción por el acuerdo que ayer alcanzaron los grupos representados en el Congreso de los Diputados para aprobar hoy la puesta en marcha de la Orden de Protección de las Víctimas de la Violencia Doméstica, anticipando una medida que en principio estaba pensada para el mes de septiembre.

Mañas, que el pasado lunes expresó su oposición a este aplazamiento el mismo día que se producían dos nuevas víctimas, pidió entonces que cualquier medida para atajar este problema debía tomarse cuanto antes y así mostró hoy su satisfacción por el acuerdo y reiteró la necesidad de un pacto político en todo el Estado para cortar el terrorismo doméstico. A su entender, es el problema más importante del país.

"Es intolerable que haya 43 mujeres que hayan muerto a manos de sus compañeros y muchas de ellas hayan denunciado 20 ó 30 veces a su agresor. No podemos cruzarnos los brazos y si hacen falta recursos y dinero hay que ponerlo sobre la mesa, como una prioridad de este país", agregó.

Mañas hizo estas declaraciones, a preguntas de los periodistas, durante la toma de posesión del nuevo delegado provincial de Bienestar Social, Francisco Palop, a quien dio la bienvenida y animó a seguir pendiente de las personas con más necesidades. Especialmente, le pidió detectar los problemas de quienes no se dirigen a las administraciones.

En cuanto a los proyectos que se están ultimando en la capital conquense, dijo que se concretan los preparativos para abrir la residencia de discapacitados gravemente afectados, cuya obra civil ya está terminada, y que la residencia de mayores ya tiene contratando el personal necesario para que, antes de fin de año, esté en funcionamiento. Tendrá capacidad 120 personas y un centro de día.