La entrada en servicio de las nuevas brigadas de intervención forestal (BIFOR) de Alcoba de los Montes y de Villahermosa son la principal novedad en la provincia de Ciudad Real de la campaña de detección y extinción de incendios forestales puesta en marcha el pasado día 1 por el Gobierno de Castilla-La Mancha.
Según explicó el director general de Política Forestal del Ejecutivo regional, Darío Dolz, la campaña tiene un presupuesto de 118 millones de euros, un 5,36% más que el año pasado, e implica la participación de alrededor de tres mil personas.
Dolz señaló que además de las dos bases de las BIFOR, unidades que están formadas por veinticuatro especialistas, dos responsables helitransportados y dos técnicos, en Ciudad Real destaca también la creación de un nuevo Centro Operativo Provincial (COP) que sustituirá en las próximas semanas al actual, ubicado en la Delegación de la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente.
El director general de Política Forestal detalló que el operativo de detección de incendios en la provincia está integrado por veintiún puestos de vigilancia fija y dieciocho patrullas móviles a las que hay que añadir cinco helicópteros que se utilizan tanto para vigilancia como para desplazar a los cinco retenes helitransportados acantonados en la provincia.
Además de estos retenes, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha asignado a la provincia de Ciudad Real cuatro retenes equipados con vehículos autobomba, catorce brigadas terrestres, que disponen también de un autobomba, de un camión nodriza y de siete equipos de maquinaria pesada.
Estos medios se completan con el operativo dispuesto por el Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino en los dos parques nacionales de la provincia, Las Tablas de Daimiel y Cabañeros. Mientras el humedal cuenta con un retén y un vehículo autobomba, en Cabañeros se han dispuesto dos retenes terrestres y un equipo de maquinaria pesada.