LAS DOS UNIDADES ANTITABACO DE LA PROVINCIA DE CIUDAD REAL HAN ATENDIDO A 600 PACIENTES EN LOS SEIS PRIMEROS MESES DE ACTIVIDAD
Las dos Unidades de Tratamiento Especializado del Tabaquismo implantadas por el SESCAM en las áreas de salud de Ciudad Real y de La Mancha Centro, han completado sus seis primeros meses de actividad con el balance de 600 pacientes atendidos, de los que 57 han dejado de fumar tras participar durante medio año en el programa de deshabituación que se ha desarrollado a nivel individual y por grupos.
La disminución del tabaquismo entre los que ya sufren esta adicción, la prevención de la aparición de nuevos consumidores y la protección de los no fumadores son los objetivos principales del Plan de Prevención y Tratamiento del Tabaquismo diseñado por la Consejería de Sanidad que contempla, entre otras medidas, la creación de unidades especializadas en cada una de las áreas sanitarias de nuestra comunidad autónoma para atender este importante problema de salud.
Seis meses después de la puesta en marcha de este recurso asistencial en el Hospital del Carmen, para atender a los fumadores del Área de Salud de Ciudad Real, y en los Hospitales de Alcázar de San Juan y de Manzanares, que presta cobertura a La Mancha Centro, ambas unidades han atendido a un total de 600 pacientes durante todo este periodo de tiempo, 57 de los cuales han completado medio año de abstinencia.
Todos los pacientes que han pasado por estas unidades desde principios del mes de febrero han recibido un tratamiento farmacológico personal y han participado en terapias individuales o en grupo que les han ayudado a superar la adicción. En una primera consulta se realiza una historia clínica general y otra tabáquica que refleja el tiempo que el paciente lleva fumando y los cigarrillos que consume a diario. El posterior conocimiento del grado de dependencia del tabaco y el grado de motivación para dejar de fumar sirve para prescribir el tratamiento más indicado para cada caso.
La Unidad de Tratamiento Especializada del Tabaquismo (UTET) del Área Sanitaria de Ciudad Real, ubicada en el Hospital del Carmen de la capital, ha ayudado a dejar de fumar a 344 pacientes durante estos seis primeros meses de funcionamiento. Un total de 32 personas han llegado hasta el final con éxito, 20 de forma individual y otros 12 a través de terapia grupal, aunque no será hasta febrero de 2005 cuando reciban el alta médica definitiva.
Con una media mensual de 55 consultas nuevas y 200 revisiones, a la Unidad Antitabaco de Ciudad Real llegan en su mayoría fumadores procedentes de las consultas del médico de familia y en menor medida derivados por otros especialistas hospitalarios, con un porcentaje similar de hombres y mujeres entre los 23 y los 76 años de edad, y una gran motivación inicial para intentar superar su dependencia al tabaco, explican Rocío Santiago y Cruces Sánchez, neumóloga y enfermera de la Unidad, respectivamente.
Por su parte, la UTET del área de salud de La Mancha Centro pasa consulta tres días a la semana en el Hospital de Alcázar de San Juan, uno en el de Manzanares y otro lo dedican sus responsables a tareas administrativas. A lo largo del primer semestre de actividad, la Unidad ha atendido a 256 pacientes. Cada dos meses se incorpora un grupo de 40 nuevos fumadores que recibe un tratamiento intensivo, tras el cuál reciben un diploma de felicitación y acuden a revisiones más espaciadas.
Del grupo inicial, una vez transcurridos los seis primeros meses, siguen sin fumar un total de 25 a los que los responsables de la Unidad el doctor Ricardo Abengózar y el enfermero Carlos Fernández--, realizan un seguimiento telefónico periódico. El mayor volumen de pacientes atendidos procede del resto de especialistas de ambos hospitales, así como de los propios trabajadores de los centros sanitarios del área La Mancha Centro, son en su mayoría mujeres. A partir de septiembre se abrirá la consulta a la derivación desde Atención Primaria.
Además de la actividad propiamente asistencial, el trabajo de las dos unidades antitabaco durante estos seis primeros meses se ha orientado también hacia la formación continuada, la investigación y la prevención del consumo tabáquico.