Los 16 centros de día de Atención a la Familia y Adolescencia que dispone la comunidad autónoma ha atendido en el primer semestre de este año a 910 familias y 1.371 menores de entre 12 y 18 años de edad (815 niños y 556 niñas) Para su funcionamiento, el Gobierno de Castilla-La Mancha destina este año dos millones de euros.
De los usuarios atendidos, 384 familias y 852 menores (490 niños y 362 niñas) han sido en los siete centros de atención a la familia y adolescencia de la provincia de Toledo ubicados en Sonseca, Puebla de Almoradiel, Talavera de la Reina, Villacañas y dos en la capital.
En los tres centros de atención a la familia y adolescencia de la provincia albaceteña (Albacete, Almansa y Villarrobledo) se han atendido a 229 familias y 192 menores (131 niños y 61 niñas)
En los dos centros de la provincia de Ciudad Real (Alcázar de San Juan y Valdepeñas) se ha atendido a 106 familias y 118 menores (66 niños y 52 niñas)
También la provincia conquense cuenta con dos centros (Cuenca y Tarancón) que han atendido a 89 familias y 102 menores (70 niños y 32 niñas)
Por último, en la provincia alcarreña con dos centros en Guadalajara y en Azuqueca de Henares se han atendido a 102 familias y 107 menores (58 niños y 49 niñas)
Este programa cuenta con 70 profesionales contratados a jornada completa, con formación específica en el ámbito social (psicólogos, educadores y trabajadores sociales)
El Gobierno de Castilla-La Mancha seguirá abriendo nuevos centros hasta implantarlos en todas las localidades de más de 20.000 habitantes, teniendo prevista la apertura de dos nuevos centros a lo largo del año 2010.
Política familiar
Este programa se enmarca en el compromiso del presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, de imprimir un fuerte impulso a las políticas familiares en la región.
Su objetivo es promover el desarrollo integral de los adolescentes en los ámbitos personal, familiar, educativo y social, buscando favorecer su madurez y evolución personal y grupal, y dotar a las familias de habilidades para resolver conflictos y manejo de situaciones problemáticas.
Está dirigido a niños y adolescentes entre los 12 y 18 años y a familias cuyas circunstancias personales, relacionales o ambientales supongan o puedan suponer dificultades para el óptimo desarrollo de cualquiera de sus miembros.
Los profesionales del centro mantienen con los menores tutorías individualizadas y apoyo a la escolarización, además de organizar talleres artísticos y de formación, juegos grupales en medio abierto, club de ocio juvenil, actividades deportivas y campamentos urbanos.
Con las familias los profesionales también llevan a cabo tutorías y entrevistas individualizadas, charlas sobre asuntos de interés para los padres y talleres formativos.