LA NUEVA LEY DE FARMACIA GARANTIZA EL FUTURO DEL SECTOR EN CASTILLA-LA MANCHA
Roberto Sabrido, que asistió al VIII Congreso Nacional de Fefe, destacó que el presupuesto de la Junta en materia de sanidad crecerá un 15% en 2006.
El consejero de Sanidad, Roberto Sabrido, aseguró hoy en Toledo, durante su intervención en el VIII Congreso Nacional de de la Federación Española de Farmacéuticos Empresarios (Fefe), que la nueva Ley de Ordenación del Servicio Farmacéutico de Castilla-La Mancha, aprobada el pasado mes de junio por las Cortes regionales, garantiza la viabilidad de este sector en la comunidad autónoma.
Es una ley que nos beneficia a todos, porque subsana ciertas inseguridades que existían en el sector, preserva los principios que sustentaban la anterior norma que eran la cercanía de las oficinas de farmacia, la calidad de sus prestaciones y la buena atención que prestan estos profesionales a los usuarios, y añade una serie de modificaciones sobre aspectos como la transmisión, la cotitularidad o la jubilación, que garantizan el futuro del sector farmacéutico en Castilla-La Mancha, manifestó el consejero, quien estuvo acompañado en la mesa presidencial por la presidenta nacional de Fefe, Isabel Vallejo, y el presidente de la Asociación de Farmacéuticos Empresarios de Toledo (Afedeto), Ricardo de la Vega.
Para Sabrido, las oficinas de farmacia prestan un servicio público esencial en una región con una distribución poblacional tan dispersa como la nuestra, ya que Castilla-La Mancha supone el 16% del territorio nacional y el 5% de la población de España y el 54% de sus municipios tiene 500 o menos habitantes, en los que reside el 5% de los castellano-manchegos.
En su exposición, el consejero destacó que la ley fue aprobada con un consenso mayoritario del sector y recordó que el Gobierno de Castilla-La Mancha está abierto siempre al diálogo con todos los agentes sociales de la región, ya que no tenemos nunca ningún prejuicio a todas aquellas propuestas que puedan beneficiar a los castellano-manchegos.
Por último, Sabrido señaló que la sanidad sigue siendo unas de las prioridades del Gobierno de Castilla-La Mancha. El 30% del presupuesto de la Junta para 2006 va a ir destinado a políticas sanitarias y el crecimiento del presupuesto sanitario para el año que viene será del 15%, superando por primera vez la barrera de los 2.000 millones de euros.