El Gobierno de Castilla-La Mancha ha destinado una ayuda humanitaria de 125.000 euros para paliar los efectos del paso de la tormenta tropical 'Hanna' en Haití, uno de los países más pobres de América y situado en la zona del Caribe, que ha provocado la muerte de centenares de personas y miles de damnificados.

Con esta ayuda se ha enviado, a petición de Cruz Roja, una Unidad de Cuidados Básicos de Salud que dispone de consultas externas, servicio materno-infantil, con sala de partos, y control de enfermedades, entre otros dispositivos, con capacidad para atender a unas 30.000 personas.

De esa manera, se pretende paliar la falta de recursos básicos e infraestructuras en el país caribeño tras el paso de la tormenta tropical y mejorar su situación sanitaria.

También se ha atenido la petición de ayuda humanitaria de la Fundación Infancia de Hoy para el suministro de alimentación básica a las zonas más afectadas por esta catástrofe natural.

'Castilla-La Mancha, con esta iniciativa, atiende el llamamiento mundial hecho por la ONU para ayudar a la gente de este país, cuya situación de gran pobreza se ha visto agravada por los efectos de la tormenta', ha señalado el consejero de Salud y Bienestar Social, Fernando Lamata.

Esta actuación forma parte de las Ayudas Humanitarias de Emergencia que se incluyen dentro del programa de Cooperación Internacional, gestionado por la Consejería de Salud y Bienestar Social, y que se aprueban con carácter de urgencia, previa solicitud por parte de una organización no gubernamental, que en este caso han sido Cruz Roja y Fundación Infancia de Hoy.

Las ayudas tiene como fin el envío de material básico de manera inmediata a cualquier zona del mundo, que haya sido afectada por una catástrofe natural o por situaciones de guerra.

El Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado el año pasado un total de 47 ayudas humanitarias de emergencia, con un importe global de 5,1 millones de euros, que se han destinado en su mayor parte a paliar la situación provocada por terremotos, inundaciones, huracanes y hambrunas debido a la sequía y el desplazamiento de miles de personas a causa de las guerras. Hispanoamérica y África han sido los principales destinatarios de estas ayudas.