"Nadie muere mientras no se le olvida". Con estas palabras recordaba el presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, la figura del dramaturgo guadalajareño Antonio Buero Vallejo, que ha dado nombre al nuevo Teatro Auditorio de Guadalajara, que fue inaugurado ayer por la noche.

Las obras de este Teatro, que cuenta con el escenario más grande de la región, han rondado los 9,6 millones de euros y han sido financiadas al 50% entre el Gobierno regional y el Ayuntamiento de Guadalajara. Se trata, según subrayó el presidente regional de una "importantísima obra" para la cultura de Guadalajara, por lo que Bono reconoció sentirse muy satisfecho de asistir al acto de inauguración.

El espectáculo de Rafael Amargo "Poeta en Nueva York" fue el primero en levantar el telón de este Teatro después de que en la entrada del mismo se descubriera un busto de Buero Vallejo, en un acto de homenaje al que también asistieron la viuda y el hijo del dramaturgo.

El presidente de Castilla-La Mancha hizo un reconocimiento público de "la capacidad, inteligencia y vigor de Antonio Buero Vallejo" y manifestó que "evocar a este hombre, revivirle en el recuerdo, en el cariño y en el afecto es hacerlo presente". A juicio de Bono el hecho de ponerle el nombre del escritor a este Teatro "es un acto de dignidad y de justicia".

Con anterioridad a esta inauguración, el presidente regional asistió al acto de conmemoración del 50 aniversario del colegio Salesiano en Guadalajara. Bono destacó el enorme trabajo realizado por dicha comunidad en este medio siglo y las muchas personas que en este centro docente han sido educadas "en los valores de don Bosco, que eran valores sencillos y muy profundos con los que la humanidad caminaría por sendas bastante más justas que las que en la actualidad tenemos".