El presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, destacó durante el homenaje a Vicente Ferrer que se celebró ayer en Madrid, los valores, “dignos de ser imitados”, de este antiguo sacerdote jesuita, que ha dedicado su vida a trabajar a favor de las personas desfavorecidas de India.

A preguntas de los periodistas, Bono resaltó la labor de este misionero, del que, dijo, “es un santo que no está en los cielos, es un santo laico”, y se mostró orgulloso de ser “cómplice” de una persona que “hace lo que él hace”.

El presidente regional recordó que ha tenido ocasión de viajar a India para conocer los proyectos que la Fundación que lleva el nombre de este jesuita ha materializado en este país asiático, donde ha podido comprobar que miles de personas viven mejor gracias a su esfuerzo.

La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha colabora con la Fundación Vicente Ferrer en diversos proyectos, como la construcción de viviendas.

Dicha Fundación lleva 50 años trabajando para erradicar la pobreza, las injusticias y la discriminación social que sufre una importante parte de la población en India.

En el acto homenaje a Vicente Ferrer participaron importantes colaboradores de esta Fundación, como la cantante Paloma San Basilio, el actor José Sacristán, el dúo “Gomaespuma” o Natalia Figueroa, entre otros.