El presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, que se mostró satisfecho del desarrollo del debate y consideró eficaz la defensa de la salud de los castellano-manchegos realizada en su intervención, se refirió también al denominado "recetazo" para asegurar su convencimiento de que finalmente se retirará porque "Aznar no está dispuesto a perder votos".

El presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, se mostró hoy "muy satisfecho" del desarrollo del debate mantenido ayer en la Comisión General de las Comunidades Autónomas del Senado sobre el modelo de financiación sanitaria y señaló que "noté al ministro Romay Beccaría tocado porque nadie le había dicho tan claro que nos había defendido mal (en relación a las regiones que integran el territorio Insalud) e, incluso, que nos había vendido".

"Esto es duro de decir -explicó Bono-, pero es mucho más duro tener que soportar que del fondo de asistencia hospitalaria le lleguen 400 pesetas a cada castellano-manchego, mientras que a cada catalán le llegan 4.000".

El presidente de Castilla-La Mancha hizo estas declaraciones mientras asistía a una demostración organizada por Iberdrola sobre la ejecución de trabajos en tensión en líneas eléctricas aéreas. En concreto, los trabajadores de la compañía han realizado, sin necesidad de cortar el suministro eléctrico, la instalación y la conexión a los conductores de un apoyo intermedio entre dos torres eléctricas, con el fin de elevar a 8 metros unos cables de alta tensión que se encontraban algo bajos.

Bono, tras comentar que todas aquellas personas con las que ha hablado le han dicho que la defensa de la salud de los castellano- manchegos realizada en su intervención fue eficaz, calificó de "inadmisible" la distribución de los fondos por parte del Ministerio y reiteró que el Gobierno regional quiere que se le transfieran las competencias en materia de Sanidad.

"Nosotros no hemos estado en la mesa de negociación de los fondos sanitarios, sino que hemos estado representados por el ministro. Por ello, hemos tenido que pedir a Romay Beccaría que se retire y nos dé las competencias en materia de salud. Queremos defendernos nosotros porque, ya verán como si estamos nosotros en las negociaciones no le van a dar a una región diez veces más que a Castilla-La Mancha", puntualizó José Bono.

Recetazo

Por otra parte y en relación al denominado "recetazo", el presidente castellano-manchego se mostró convencido de que, a pesar de la negativa de Romay Beccaría, finalmente esta medida será retirada "porque Aznar no está dispuesto a pagar el precio de perder votos".

A juicio del presidente regional, la sociedad española no va a consentir que "yendo tan bien España", las medicinas las tengan que pagar los ciudadanos, "que no son potentandos". En este sentido, Bono afirmó que "España va bien, pero la salud de algunas personas no va a ir bien ni con un fondo de asistencia hospitalaria injusto, ni con el recetazo".

Asimismo, Bono manifestó que esta medida es muy grave, no sólo porque los médicos puedan recetar una medicina con valor terapéutico que después, al estar excluida de la financiación pública, sea el ciudadano quien tenga que abonarla, sino porque "además se va a tener que pagar el precio que quieran poner los laboratorios farmacéuticos, ya que los medicamentos excluidos tendrán libertad de precios".

Junto a la gravedad del asunto, Bono señaló también que "esto es escandaloso, sobre todo, porque el PP fue quien dijo que iba a incluir hasta las jeringuillas dentro de la Seguridad Social".

No obstante, Bono insistió en que finalmente el "recetazo" se retirará y añadió "o el ministro cambiará de posición, o cambiará el ministro o cambiará el Gobierno".