El presidente de Castilla-La Mancha inauguró anoche en Ciudad Real el curso de la Escuela de Ingenieros de Caminos, cuya primera lección fue impartida por el secretario federal del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero.

El presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, destacó anoche en Ciudad Real que el impulso de los ciudadanos de la región ha convertido los ritos del pasado en los símbolos de nuestra modernidad, una mutación que se pone de manifiesto con la transformación vivida por edificios como el Rectorado de la Universidad de Castilla-La Mancha en Ciudad Real, que fue en tiempos hospital de beneficencia y cuartel militar, el Alcázar de Toledo, que es hoy sede de la segunda biblioteca en importancia de España, o la antigua Fábrica de Armas de Toledo, que acoge varias facultades de la Universidad regional.

Para Bono, la Universidad de Castilla-La Mancha es “el símbolo” de nuestra región porque ”sin autonomía no tendríamos universidad”, a pesar de que eran muchos los que desconfiaban de la viabilidad de ambas. Hoy, afirmó, los que decían que la universidad no hacía falta porque no habría universitarios se equivocaban, como demuestran los más de treinta mil alumnos matriculados, igual que se equivocaba no hace mucho una ministra cuando calificaba la Universidad de Castilla-La Mancha de “academias provinciales sin calidad”.

El presidente de Castilla-La Mancha hacía estas manifestaciones en la inauguración del curso de la Escuela Técnica Superior de la Escuela de Caminos, Canales y Puertos en el Rectorado de la Universidad de Castilla-La Mancha, cuya primera lección fue impartida por el secretario federal del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero.

En su intervención, Bono se refirió a las críticas que ha levantado la presencia de Rodríguez Zapatero en este acto académico y afirmó que la Universidad es tan autónoma como la región y, por eso, tiene potestad para “hacer lo que quiera sin tener que dar explicaciones”.

Además, añadió, José Luis Rodríguez Zapatero es el líder político mejor valorado por los españoles según el CIS, dato que, en su opinión, le cualifica para haber aceptado la invitación de la Escuela de Caminos y para merecer el respeto de los que no comparten su opción política.

Para el presidente de Castilla-La Mancha, “aquí caben todos salvo los que disculpan a los propios y descalifican a los ajenos” y quieren rememorar el dicho del general Narváez: “no tengo enemigos, los he matado a todos”.