EL PRESIDENTE BARREDA IDENTIFICA LA CRUZ ROJA CON SOLIDARIDAD, AYUDA EFICAZ, TRABAJO HUMANITARIO Y RESPETO A LA DIVERSIDAD
La Infanta Cristina destacó la figura de la ciudad de Toledo que, según dijo, “en sus monumentos, su trazado, su memoria, en su personalidad” trasmite sentimientos íntimamente ligados al Día Mundial de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja. En este marco Su Alteza Real aseguró que los premiados son una muestra concreta, y de excelencia, de entidades y personas que dedican su vida a servir a los más necesitados sin esperar nada a cambio.
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, aseguró hoy en Toledo que Cruz Roja es sinónimo de solidaridad, ayuda eficaz y trabajo humanitario “para reducir los daños ocasionados por los desastres, para atender las emergencias de salud pública y las situaciones de vulnerabilidad más urgentes, para promover el respeto a la diversidad y la dignidad humana, combatir la intolerancia y la discriminación y la exclusión social”.
El jefe del Ejecutivo autonómico hacía estas declaraciones en el marco de la celebración del Día Mundial de la Cruz Roja y la Media Luna, que bajo la presidencia de Su Alteza Real, la Infanta Cristina ha tenido lugar en el Museo de Santa Cruz en Toledo.
Precisamente la Infanta Cristina destacó la figura de la ciudad de Toledo que, según dijo, “en sus monumentos, su trazado, su memoria, en su personalidad trasmite sentimientos íntimamente ligados a esta celebración”. En este marco Su Alteza Real aseguró que los premiados son una muestra concreta y de excelencia de entidades y personas que dedican su vida a servir a los más necesitados sin esperar nada a cambio.
“De este modo la entrega solidaria de voluntarios y organizaciones a quienes se enfrentan a la soledad, la enfermedad, la precariedad o la desesperación, no sólo es una necesidad social, sino que enriquece internamente como seres humanos a quienes ofrecen sus mejores esfuerzos a favor de los demás”, apuntó la Infanta Cristina.
Del mismo modo, José María Barreda que ensalzó la figura de los integrantes y voluntarios, aseguró que la estructura de Cruz Roja en sociedades nacionales y, en España, en asambleas regionales, provinciales y locales, le permite estar muy cerca de la realidad, muy cerca de las necesidades, muy cerca de las personas.
A este respecto mencionó, de manera especial, por la cercanía que conlleva, a la Asociación de Padres con Niños y Adultos Discapacitados de Toledo, a María del Carmen Cabellos o al Hospital Nacional de Parapléjicos.
Admiración y gratitud
Barreda dejó constancia de su admiración y gratitud hacia los hombres y mujeres de buena voluntad que se conmovieron cuando se movieron las tierras de Haití y Chile, “nuestras conciencias se remueven conociendo vuestro ejemplo y vuestra entrega, ello hace que, como los viejos rockeros, querido Miguel, las buenas causas nunca mueren, nunca prescriben”, apuntó.
Tras subrayar que en el mapa de las catástrofes y de los conflictos internacionales más lejanos está omnipresente la Cruz Roja, y en la realidad de la población más vulnerable de los barrios más próximos, está también Cruz Roja, indicó que sólo una buena y gran organización permite esa especie de “don de la ubicuidad” que hace que aparezca siempre donde se la necesita.
En Castilla-La Mancha, Cruz Roja beneficia a más de 165.000 personas mediante los 88 proyectos que anualmente ejecutan en la Región, con la participación de 11.000 voluntarios.
El presidente autonómico explicó que la Cruz Roja en Castilla-La Mancha está cada vez más cerca de las personas y, sobre todo, de los más necesitados. El Gobierno regional tiene concertada con ella el “Programa de Teleasistencia” que beneficia a 41.000 personas, con 32.000 terminales instalados en 832 municipios.
Tras felicitar a todos y cada uno de los galardonados y agradecerles su contribución para conseguir un mundo mejor reafirmó su confianza en las personas, en los hombres y mujeres de buena voluntad, en la esperanza de la posibilidad de un mundo mejor.
“Gracias porque con vuestro ejemplo nos recordáis la grandeza de los seres humanos y mantenéis viva la llama del deseo utópico de la posible hermandad de todos los habitantes del planeta”, dijo Barreda al tiempo que reiteró su agradecimiento al Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, que conforman la mayor red humanitaria del mundo.
El presidente de Cruz Roja Española, Juan Manuel Suárez del Toro, agradeció la acogida en Toledo, que definió como ciudad que desemboca en una consolidada realidad de concordia y progreso, después de siglos de intercambio y sedimento cultural. “La Cruz Roja y la Media Luna Roja comparten la vocación universal de esta ciudad que en su historia ha sido domicilio de gente, culturas y pensamientos diversos.
Suárez del Toro, que reivindicó una cultura global de de solidaridad, proclamó la determinación a continuar profundizando y extendiendo el compromiso de esta organización con los más vulnerables. En este sentido indicó que el año pasado voluntarios y voluntarias de Cruz Roja Española lograron que más de un millón de personas pudieran tener acceso a alguna de sus iniciativas de apoyo.
En representación del Ministerio de Sanidad y Política Social tomo la palabra, la subsecretaria de Sanidad y Política Social, Consuelo Sánchez Naranjo, quien agradeció el trabajo noble que día a día hace esta organización tanto dentro como fuera de nuestras fronteras al tiempo que tuvo palabras de reconocimiento hacia el Gobierno de Castilla-La Mancha por su notable impulso a las políticas sociales.
El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, mencionó las siete premisas sobre las que versan los principios de Cruz Roja Española: humanidad, imparcialidad, neutralidad, independencia, voluntariado, unidad y universalidad al tiempo que agradeció a Cruz Roja y a la Media Luna Roja haber elegido Toledo para esta entrega de medallas, que por primera vez se realiza en Castilla-La Mancha.
“Hay pocos lugares como Toledo que pueda representar mejor el espíritu de universalidad del que hace gala el movimiento internacional de Cruz Roja”, dijo García-Page.
Condecorados
El acto de esta año se celebra bajo el lema “Cada vez más cerca de las personas” con el que se quiere reforzar la proximidad de Cruz Roja hacia las personas más vulnerables, acercándose aún más a sus necesidades y ayudándoles desde la proximidad y la cercanía, gracias a los más de 100 millones de voluntarios con los que cuenta en 186 países.
Los condecorados en esta ocasión han sido: la placa de honor a título póstumo para Manuel Fiol Calafat en homenaje a toda una vida de dedicación a las personas vulnerables en Cruz Roja Española; la Medalla Florence Nightingale para Juana María Hernández Conesa, es la tercera española merecedora de esta condecoración y se le otorga por considerar es pionera en España de varias facetas de los cuidados de enfermería; para el Hospital Nacional Parapléjicos de Toledo; a título póstumo para Gonzalo Jar Couselo, general de División de la Guardia Civil; para la Cruz Roja Haitiana; para la Cruz Roja Chilena y para Cruz Roja Sudáfrica.
También serán condecorados: la Red Europea de lucha contra la pobreza, una coalición independiente de ONG creada por organizaciones que trabajan con personas que viven en situación de pobreza y exclusión dentro de la Unión Europea; la Asociación Provincial de padres con niños y adultos discapacitados de Toledo (APANAS); María del Carmen Cabellos Aparici que ha dedicado toda su vida profesional a los Servicios Sociales; la Fundación Castellano Manchega de Cooperación; el Colegio de Parálisis Cerebral Infantil de Valencia; Ricardo Diéz Hochleitner, que siendo presidente del Club de Roma impulsó el trabajo del Club de Roma sobre cuestiones sociales y medioambientales, para mejorar las condiciones de las personas más vulnerables; el cantante Miguel Ríos, voluntario de Cruz Roja en Granada; el Proyecto integral de atención a inmigrantes de CRE, en BAENA (Córdoba) y el Proyecto de atención a mujeres vulnerables y víctimas de la violencia de género de CRE en Gijón.
En representación de todos ellos intervino Ricardo Diez Hochleitner, que siendo presidente del Club de Roma impulsó el trabajo del Club de Roma sobre cuestiones sociales y medioambientales, para mejorar las condiciones de las personas más vulnerables.
Diez Hochleitner reivindicó la dignificación de las condiciones de vida de las personas y la defensa de sus derechos. Tras agradecer en nombre de los galardonados, el reconocimiento de Cruz Roja y la Media Luna Roja, dijo que desde el voluntariado se está mas cerca de las personas y se debe estar cerca para dar la oportunidad a todas las personas de ejercer los derechos humanos, desde valores éticos y morales.
Galería Multimedia
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Barreda y Su Alteza Real la Infanta Doña Cristina en el Día Mundial de la Cruz Roja
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Barreda y Doña Cristina en el Día Mundial de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja
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Barreda y la Infanta Cristina entregan la Medalla a Lamata.
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