El Gobierno de Castilla-La Mancha convoca la Mesa de la Minería el próximo 5 de junio para escuchar demandas y necesidades del sector
Castilla-La Mancha es, hasta el momento, junto a Cataluña la única Comunidad Autónoma del país que se preocupa por eliminar el impacto medioambiental que deja la minería, ejecutando los avales de las empresas que no han restituido la zona en la que han intervenido, y llevando a cabo las obras necesarias tendentes a rehabilitar dichas áreas.
Desde 2015, el Ejecutivo autonómico ha ejecutado 10 avales en las provincias de Albacete, Ciudad Real, Guadalajara y Toledo, lo que supone haber invertido más de 560.000 euros en recuperar nuestro patrimonio natural.
Fuente El Fresno (Ciudad Real), 24 de mayo de 2017.-El Gobierno de Castilla-La Mancha ha convocado la Mesa de la Minería para el próximo día 5 de junio, a la que está llamado todo el sector minero regional, así como otros departamentos del Ejecutivo autonómico relacionados con esta actividad. “Queremos escuchar las demandas y necesidades del sector”, ha dicho la consejera de Economía, Empresas y Empleo del Gobierno de Castilla-La Mancha, Patricia Franco en el marco de una visita a los trabajos de restauración de la explotación minera ‘El Charco del Tamujo’ en Fuente El Fresno, Ciudad Real.
“Somos un Gobierno preocupado por el impacto ambiental que puede tener la actividad minera, y perseguimos bajo todos los medios que ésta deje las menores huellas posibles en el territorio”, ha apuntado, al tiempo que ha aseverado que se trata de una cuestión de preservación de la biodiversidad y el patrimonio natural con el que cuenta.
En este contexto, ha avanzado que en el encuentro del próximo 5 de junio, se van a plantear dos temas fundamentales como la necesidad de crear a nivel regional un Código de Gestión de Prácticas Ambientales en la Actividad Minera, que permita asegurar que la actividad minera que se desarrolla en Castilla-La Mancha es una actividad sostenible desde el punto de vista medioambiental, y la idoneidad de modificar el sistema de garantías de recuperación medioambiental, para asegurar que la restauración de las zonas afectadas por la minería se produce mejorando el patrimonio natural y las posibilidades que este ofrece desde el punto de vista económico y de mejora de la calidad de vida de la ciudadanía.
Castilla-La Mancha es, de momento, junto a Cataluña, la única Comunidad Autónoma del país que se preocupa por eliminar el impacto medioambiental que deja la minería, ejecutando los avales de las empresas que no han restituido la zona en la que han intervenido, y llevando a cabo las obras necesarias tendentes a rehabilitar dichas áreas.
Según los datos manejados por Patricia Franco, las empresas mineras que operan en Castilla-La Mancha tienen depositados en la actualidad más de 74,2 millones de euros en avales. Lo habitual es que esas empresas acometan las actuaciones necesarias de reconstrucción, pero si no es así, el Gobierno regional garantiza que esa reconstrucción y reparación de la zona se va a producir.
Desde 2015, El Gobierno de Castilla-La Mancha ha ejecutado 10 avales, en las provincias de Albacete, Ciudad Real, Guadalajara y Toledo, lo que supone haber invertido más de 560.000 euros en recuperar nuestro patrimonio natural. De éstos, tres intervenciones han sido en la provincia de Ciudad Real, por valor de más de 117.000 euros.
Además y según ha avanzado la consejera, este verano, se continuará con la rehabilitación medioambiental de huecos mineros, con el comienzo de la restauración de cinco huecos más en las provincias de Cuenca y Toledo, por valor de más de 120.000 euros.
La consejera hacía estas declaraciones a los medios de comunicación en el marco de una visita a los trabajos de restauración de la explotación minera ‘El Charco del Tamujo’ que, tras más de 20 años de extracción de áridos en este paraje, dio comienzo en 2014. Una actuación que en colaboración con la Dirección General de Industria, Energía y Minería de la Consejería de Economía, Empresas y Empleo y la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural del Gobierno de Castilla-La Mancha han permitido recuperar un humedal, potenciando la biodiversidad que existe en este paraje.
“La intervención que ha llevado a cabo la empresa Lafarge es un ejemplo claro del modelo de minería que el Gobierno regional quiere para Castilla-La Mancha”. ha apuntado Patricia Franco, que también ha aseverado que en Castilla-La Mancha hay 278 minas en activo, que producen más de 12,1 millones de toneladas de producto vendible y que supusieron la facturación, en 2015, de más de 120,3 millones de euros.
Desde la empresa LafargeHolcim España, su director general, Isidoro Miranda, ha indicado que para estos trabajos han contado con el apoyo de la Administración autonómica que ha ayudado a crear un espacio de biodiversidad y “conseguir así un medio que es ejemplar y crear algo parecido a la Tablas de Daimiel, somos partidarios del concepto de empresa y sociedad sostenible”.
La minería en la región genera empleo directo para más de 1.400 personas. “Estamos ante un sector que tiene un claro efecto dinamizador de otros sectores, como el de la construcción y el del transporte principalmente, generando notables empleos y actividad económica indirectos”, ha subrayado la responsable del área en la región.
“Queremos que la actividad minera que se desarrolle en Castilla-La Mancha sea una actividad económica viable que genere riqueza y empleo, también que sea sostenible, respetuosa con el medio ambiente y que ofrezca oportunidades de futuro a las zonas rurales”, ha concluido.
En la provincia de Ciudad Real, son 31 las explotaciones activas, con 231 trabajadores, una producción de más de 1,2 millones de toneladas y una facturación que supera los 26,4 millones de euros.
“Es una realidad que en la actualidad no podríamos vivir con el nivel de vida que queremos, en una sociedad del siglo XXI, sin la minería. Sin los áridos el sector de la construcción no puede sustentarse, y sin la minería metálica la tecnología que usamos diariamente no existiría, y muchos sectores basados en tecnologías punteras, como el de las energías renovables, el aeronáutico o el de las TICs, no tendrían oportunidades de futuro” ha asegurado Patricia Franco que también ha reconocido que ante el rechazo que genera la actividad minera en la sociedad, el Gobierno de Castilla-La Mancha considera que las empresas mineras deben hacer esfuerzos por transmitir a la sociedad las bondades de esta actividad económica y por restituir las posibles huellas que ésta pueda dejar en el territorio.