El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, anunció hoy que va a pedir al que fuera el presidente de la Real Fundación de Toledo, Gregorio Marañón, que asuma la dirección de la organización del Año Greco para, de esta forma, poder empezar a trabajar de forma inmediata “y conseguir que el 2014 resulta espectacular”.
Barreda aseguró, tras el encuentro que mantuvo en Toledo con el actual presidente de la Fundación, Fernando Ledesma, que en el horizonte a medio plazo “hay una fecha particularmente simbólica e importante, que es el 2014 y que tiene que ser el año Toledo, pues Toledo y el Greco en esa fecha han de ser la referencia internacional para todo el mundo artístico e intelectual”.
Sin embargo, Barreda insistió en que, para conseguirlo, hay que evitar la improvisación y trabajar para hacer las cosas bien, de ahí su interés en que sea Gregorio Marañón el que dirija al equipo que organizará un evento que, tal y como recordó el presidente, atraerá a miles de personas a la capital castellano-manchega.
Por su parte, Ledesma compartió con el presidente esta reflexión y aseguró que el Año Greco puede ser muy importante para Toledo, también para Castilla-La Mancha y para España, “puede ser incluso una celebración de impacto europeo y, naturalmente, de esto se tiene que alegrar todo el mundo”.
En este sentido, aseguró que esto va a requerir una colaboración entre todas las administraciones públicas, “pero también por parte de la iniciativa privada”, al tiempo que manifestó que la disposición de la Fundación a colaborar en todo momento.
Por otro lado, el presidente Barreda explicó que durante su encuentro con Fernando Ledesma se llegó a la decisión de dar un impulso a la Vega Baja tanto desde la Fundación, como desde el Gobierno regional “y todos los que estamos interesados en aprovechar un oportunidad excepcional para hacer el más importante yacimiento arqueológico europeo en una de las ciudades más importantes de Europa y del mundo”.
Finalmente, Barreda, que se mostró convencido de que la Real Fundación de Toledo “está en muy buenas manos” y de que “va a seguir funcionando muy bien tanto ella misma como su relación con el Gobierno regional”, destacó la importante labor que realiza esta institución y el importante papel que juega en determinados asuntos como la Vega Baja, en el que participó, recordó el presidente, con una campaña de sensibilización, y con planteamientos razonables y razonados.
“Su ayuda resultó muy importante para que todo el mundo asumiera que la Vega Baja es un valor preñado de futuro, pues son muchas las posibilidades que tiene en una ciudad Patrimonio de la Humanidad que tiene su mayor industria en el turismo y, por tanto, hay que saber valorarla y en Toledo tenemos la suerte de contar con la Fundación”, señaló.
Ledesma sustituye a Gregorio Marañón
El hasta ahora vicepresidente de la Real Fundación de Toledo, Fernando Ledesma, fue nombrado recientemente nuevo presidente de la institución en sustitución de Gregorio Marañón y Bertrán de Lis, quien presentó su renuncia en la reunión de la Junta de Protectores.
Fernando Ledesma Bartret (Toledo, 1939) es magistrado del Tribunal Supremo de España. Fue ministro de Justicia (1982-1988) durante el mandato de Felipe González y presidente del Consejo de Estado entre 1991 y 1996. Está casado y tiene 4 hijos.