El consejero Francisco Martínez Arroyo ha indicado que en Castilla-La Mancha se quiere legar a un acuerdo en materia hídrica sin enfrentamientos con territorios o con otros agricultores. “No queremos enfrentamientos en Castilla-La Mancha, queremos simple y llanamente defender los intereses de los ciudadanos de la región” y hacerlo de “esta forma solidaria que hemos venido demostrando” desde el inicio de la legislatura pasada. Ha sido, ha dicho, un proceso largo “el que nos ha hecho llegar hasta aquí y tenemos que concluir con un documento que de verdad defienda nuestros intereses desde ese planteamiento de mano tendida al resto del país”. Y es que, ha reseñado,  “es necesario llegar a un acuerdo en nuestro país sobre el agua”, algo que pasa también lógicamente porque en la planificación hidrológica se tengan en cuenta los aspectos a los que podamos llegar a un acuerdo en el país y que “el agua esté donde esté nos ayude a generar desarrollo económico,  esto es fundamental”.