La promoción de la salud se contempla como un enfoque alternativo y a la vez complementario de la atención sanitaria y, en general, como una estrategia clave para la mejora de la salud y la calidad de vida. En la Carta de Ottawa se define la promoción de la salud como “el proceso de capacitar a los individuos y a las comunidades para que puedan aumentar el control sobre los factores que determinan la salud y por lo tanto, mejorar la misma’’.
Para desarrollar este campo de trabajo, la Dirección General de Salud Pública, Drogodependencias y Consumo, a través del Servicio de Promoción de la Salud, ordena las actividades en programas específicos de prevención primaria y secundaria.