La vicepresidenta segunda y consejera de Economía y Hacienda argumentó que Castilla-La Mancha es una región donde las Cajas Rurales han tenido, y todavía tienen, un peso específico en el conjunto de intermediarios financieros muy superior a la media nacional.
La vicepresidenta segunda y consejera de Economía y Hacienda, María Luisa Araújo, resaltó anoche, durante su intervención en la Cena de Hermandad de Caja Rural de Toledo, que las Cajas Rurales cubren el doble objetivo de ser entidades financieras de primer nivel, como así lo avalan los resultados obtenidos en los últimos años, y de cubrir el objetivo social de acercar estos servicios a los ciudadanos que viven en poblaciones donde no existen otras entidades.
En este marco recordó que de las 186 oficinas abiertas en la región por Caja Rural de Toledo, en 30 municipios sólo existe la Caja como entidad financiera. Este doble objetivo es algo que el Gobierno regional valora particularmente porque de este modo, todos los castellano manchegos pueden tener acceso a los mejores servicios a través de entidades solventes.
En el ejercicio 2007, los beneficios fueron de 38,2 millones de euros, resultados que indican el éxito del que goza la entidad con 186 oficinas abiertas, 743 empleados, 530 cooperativas y 100.000 socios.
Estos datos, dijo María Luisa Araújo, ponen de manifiesto que el año 2007 ha sido de progreso para la cooperativa de crédito y, por lo tanto, también han sido de progreso para nuestra Comunidad. Los datos estadísticos se han encargado de avalar esta afirmación. El año pasado Castilla-La Mancha progresó, gracias al trabajo de todos, consiguiendo ser la segunda región con mayor crecimiento económico (4,2% en términos reales), muy por encima del crecimiento experimentado por el conjunto del país (3,8%), según los últimos datos de Contabilidad Regional.
Ha sido un crecimiento que se ha apoyado en todos los sectores, como la industria, que ha crecido 1,3 puntos por encima de la industria española. Asimismo destaca la agricultura, cuyo crecimiento del 5% supera en 1,2 puntos al de la agricultura española. Tanto la agricultura, como la industria o parte de los servicios, son sectores básicos, es decir, capaces de sostener indefinidamente el crecimiento de la región, dijo María Luisa Araújo, quien añadió que nuestras cooperativas de crédito han sido protagonistas de nuestro desarrollo porque han contribuido al crecimiento y progreso de nuestros núcleos rurales, manteniendo la riqueza de la población.
La vicepresidenta terminó señalando que la Caja Rural ha sabido hacer bien las cosas y ha contribuido al desarrollo de los municipios dando apoyo y estabilidad a las explotaciones agrarias, y apostando por la modernización. Por ello, dio las gracias a todos los socios y compromisarios de la entidad y les animó a seguir trabajando por el futuro de esta tierra, ya que sin ellos, Castilla-La Mancha no sería lo que hoy es.
Este acto al que asistieron también el presidente de las Cortes, Francisco Pardo, el subdelegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Francisco Javier Corrochano, y el presidente de la Caja Rural, Andrés Gómez Mora, entre otras autoridades, estuvo precedido por la celebración de la Asamblea General de la Caja Rural de Toledo, que es convocada por el Consejo Rector una vez al año.