El Hospital Nacional de Parapléjicos avanza en el desarrollo de la neurorobótica para la rehabilitación inspirada en las personas
Los evaluadores europeos del programa Horizonte 2020 felicitan al consorcio tecnológico de BioMOt por sus innovadores resultados.
Toledo, 2 de noviembre de 2016.- El Hospital Nacional de Parapléjicos, centro dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, ha participado en el desarrollo biomecánico y testado del proyecto europeo titulado ‘BioMOt: Robots vestibles inteligentes con habilidades motoras y sensoriales bioinspiradas’ que, después de tres años de trabajo, ha finalizado marcando un hito en la investigación de tecnologías de la rehabilitación.
Los evaluadores europeos del programa Horizonte 2020 han felicitado al consorcio tecnológico de BioMOt, por los innovadores resultados de un trabajo que se ha concretado en un prototipo y en conocimiento relevante en este ámbito tecnológico.
BioMot ha recibido 2,6 millones de euros de financiación del programa Future Emerging Technologies, destinado a apoyar investigación de alto nivel para generar innovaciones que puedan provocar un cambio significativo respecto a lo que ya existe.
Coordinado por el Grupo de Bioingeniería del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), “el proyecto ha permitido poner a nuestro hospital en la vanguardia tecnológica para la rehabilitación, junto con las universidades de Bruselas en Bélgica, Padova en Italia, la empresa Össurhf de Islandia, las empresa española Technaid SL, el Departamento de Ingeniería de Sistemas y Automática de la Universidad Miguel Hernández y el centro de investigación japonés RIKEN”, ha manifestado el Jefe de Servicio de Rehabilitación de Parapléjicos, Ángel Gil.
Según explica el doctor Gil, con BiOMot “hemos avanzando en el mundo de la robótica vestible y en el concepto de dispositivos bioinspirados, generando un prototipo de exoesqueleto en el que participa más el usuario, gracias a que registra las variables de la voluntad recogidas mediante electroencefalografía de superficie y, además, identifica la actividad muscular a través de sensores. La detección de ambas señales permite modular el funcionamiento del exoesqueleto”.
Por su parte, el Jefe de Laboratorio de Locomoción Humana del Instituto Cajal, del CSIC, Juan Moreno, incide en que “los científicos de BioMot han estudiado además, aspectos como el control neuronal, los mecanismos de aprendizaje y una arquitectura cognitiva que permite una mejor relación hombre-máquina”.
Retos y oportunidades de la neuro-robótica
Los expertos de la Organización Mundial de la Salud destacan el prometedor futuro de estos sistemas tecnológicos en la rehabilitación de la función de la marcha en pacientes que presentan una lesión neurológica, como los que se encuentran ingresados en el Hospital Nacional de Parapléjicos.
El reto es que este tipo de investigaciones acaben en el mercado, “para lo que hay que seguir mejorando en la robustez del sistema y la precisión, mejoras de la computación control cerebral a través de la depuración de señales”, afirma Gil.
“Estamos en un momento interesante para los que trabajamos en este campo”, apunta también Juan Moreno, quien añade que “hay muchísima actividad en Europa y otras regiones del mundo. En el futuro, indudablemente, la tecnología robótica va a ayudar a los pacientes de una mejor manera que lo está haciendo ahora”.